Diana Duarte Bernal, Marcelo Salinas Rojas, Daniela Cornejo, Cynthia Olave J., Daniel Katz
Coordinadora: María José Cifuentes
La participación social y la necesidad de volver a la comunidad son temáticas recurrentes tanto en la filosofía contemporánea, como en los estudios culturales a nivel internacional. Al parecer existe, desde la teoría actual, una necesidad por cuestionar los saberes heredados y reforzar o resignificar conceptos que la sociedad ha asimilado moralmente, pero desigualado éticamente en la propia práctica cotidiana.
La comunidad, como concepto social y político moderno, se ha vuelto una palabra recurrente en los movimientos sociales de la posmodernidad. A pesar de ser problematizada en los años ochenta y noventa por la filosofía política y la antropología, hoy se rescatan en los discursos teóricos contemporáneos los análisis de filósofos tales como el francés Jean-Luc Nancy, o el italiano Roberto Esposito, quienes observan en la comunidad una “imposibilidad” en la era del capitalismo actual, producto de una crisis profunda en el sistema político que desgarra el vínculo social y que hace cuestionar el ideal de lo común, frente a una era cargada de subjetividad.
La problematización de estos conceptos evidencia a su vez un síntoma mayor, el cuestionamiento hacia el sistema político que los alberga en su definición: la democracia. La interrogante ante dicho sistema surge frente al paradigma de la representación del Estado, entre la toma de decisiones individuales y las colectivas, en un contexto donde el poder está dado, ya no por la ciudadanía, sino por la economía.